CONTROL Y CONDUCCIÓN

¿Por qué trabajar el regate y la creatividad?

El regate es la forma más directa de romper el equilibrio del rival. No se trata solo de superar a un oponente, sino de generar ventajas, abrir espacios y activar soluciones donde parece que no las hay.

La creatividad, por su parte, es la capacidad de decidir distinto, de improvisar con intención. En un contexto cada vez más automatizado, entrenar la creatividad es formar jugadores capaces de leer, adaptarse y sorprender.

Trabajar el regate y la creatividad no es fomentar el desorden, sino dar libertad desde la técnica. Porque un jugador que domina el gesto, el ritmo y el engaño, es un jugador que decide con personalidad.

Este bloque te invita a construir confianza en el 1v1, a potenciar tu expresividad en el juego y a desarrollar recursos técnicos reales para marcar diferencias donde otros repiten patrones.

Bloque 1 – Dominio técnico y control del cuerpo

El regate empieza en el cuerpo. Antes de superar al rival, necesitas dominar tus apoyos, tu ritmo y tus cambios de dirección. Este bloque te ayuda a controlar tu centro de gravedad, mejorar la agilidad y ejecutar movimientos explosivos con técnica limpia.

Bloque 2 – Creatividad en espacios reducidos

La creatividad se entrena. Este bloque recrea situaciones en espacios cortos para que el jugador improvise, combine gestos técnicos y mantenga el balón bajo presión. Aquí se trabaja la técnica al servicio de la imaginación.

Bloque 3 – Superar rivales y toma de decisiones en 1v1

El regate no es solo habilidad: es lectura, decisión y ejecución. Este bloque te entrena para identificar al rival, atacarlo y superarlo con recursos técnicos. Ideal para mejorar en el uno contra uno y ganar confianza ofensiva.